Alfonso Arias Aguilera

 

Alfonso Arias Aguilera, PMP

Manager en BBVA

 

Recientemente he participado en una jornada de Team Building que organizó la dirección de un nuevo departamento que han creado en la compañía para la que trabajo. Fuimos unas 35 personas a pasar el día a la orilla de un embalse, montamos en kayak, nos bañamos y jugamos al futbol. El objetivo de la jornada era conocernos todos un poco más ya que la mayoría nos hemos incorporado al departamento en las últimas semanas. A pesar de que considero que la jornada fue un éxito en el plano personal ya que todos nos lo pasamos muy bien, creo que no cumplió completamente con el objetivo que se perseguía. Al finalizar el evento conocía a las mismas personas que al inicio, no sabía cuáles eran sus cometidos dentro del proyecto ni de quien dependían.

Según algunos autores como Rita Mulcahy "La formación de equipo debe llevarse a cabo durante las etapas tempranas de Ia vida del proyecto" y el objetivo principal de esta herramienta es la de generar confianza dentro del equipo. Pero, ¿qué entendeos por etapas tempranas de la vida del proyecto? ¿El kick-off del proyecto? Dudo que Rita se refiera al kick-off o inicio del proyecto.

En mi opinión, para que un jornada de Team Building sea lo más efectiva posible, debería llevarse a cabo cuando el proyecto ha echado a rodar. Si recordamos cuales son las etapas formalmente identificadas de la formación y desarrollo de equipo: Forming, Storming, Norming, Performing y Adjourning yo elegiría cualquier etapa menos la de Forming para promover un Team Building ya que durante esta etapa las personas todavía no se conocen y va a ser más difícil que interactúen entre ellas.

Esto fue lo que pasó en la jornada de Team Building a la que asistí. Se crearon espontáneamente pequeños grupos de 4 o 5 personas que ya se conocían de antes, pero estos grupos no se mezclaron entre sí a pesar de participar todos en una actividad conjunta. Pienso que al desarrollarse el evento en la fase de Forming habría sido aconsejable añadir alguna actividad al principio de la jornada para introducirnos al resto: explicar brevemente nuestro currículo, nuestros cometidos presentes y nuestras expectativas sobre el proyecto. También hubiera sido positivo crear grupos de trabajo o equipos mezclando a los integrantes de manera que no se conocieran de antemano, forzando de alguna manera a que la gente se integre y se conozca, a la manera en la que se hace, por ejemplo, en los bares de intercambio de idiomas, con un facilitador o maestro de ceremonias que te pone en contacto con otra persona si te ve solo o aislado.

Desde una perspectiva global, aunque se podían haber hecho muchas cosas para enriquecer la jornada y hacerla más eficiente, considero que ésta fue muy positiva ya que creó un recuerdo colectivo agradable al que todos podremos recurrir en el futuro para hacer más fácil nuestro día a día.